2/27/2012

EL ARMA LETAL

El diablo tiene tres armas para acabar con el hombre y la mujer de Dios que están o quieren ir hacia el altar. Pero, existe una más que es fatal, y si el hombre y la mujer de Dios no vigilan, caerán por ella. 

1. La primer arma del diablo es poner mujeres en el camino del hombre de Dios, y hombres en el camino de la mujer de Dios. El diablo hace eso para debilitar al hombre o a la mujer de Dios.
2. La segunda arma usada por el diablo puede hasta parecer una bendición de Dios, que es la prosperidad. El diablo hace eso para que la persona prospere y pierda el brillo por la obra de Dios en el altar, porque él sabe que si esa persona llega al altar será un éxito rotundo. Observación: Tenemos que tener una vida bendecida antes de ir al altar, pero, sin sacar la mirada de lo que queremos, que es salvar almas.
3. La tercer arma es el orgullo, pues el diablo logra cegar a la persona, haciendo que no perciba que es orgullosa, porque un orgulloso, la mayoría de las veces, no sabe que es orgulloso.
Ahora vamos a nuestra historia para que usted descubra cuál es la 4ª arma usada por el diablo para destruir a los que hacen la obra de Dios. 

Había un pastor en una iglesia que tenía éxito en todo lo que hacía. Tenía comunión con Dios y andaba en santidad, orando, ayunando y leyendo la Biblia. Donde el iba, se desarrollaba el trabajo. Y más, muchas personas se convertían, pues allí había cura, milagros, etc. 

El diablo, viendo esto, hizo una reunión en el infierno y envió su primer demonio, la Pombagirada. Y ella le dijo al pastor: ¡Te voy a derrumbar! 
El pastor amarró lo que el demonio había hablado, oró, ayunó leyó la Biblia, fortaleció su matrimonio, y ella se fue. 
El diablo convocó otra reunión y resolvió mandar al Oxuavaricia para llenar los ojos del pastor de ambición material. Nuevamente, el pastor oró, ayunó, leyó la Biblia, sacrificó todo lo que tenía y el diablo cayó por tierra. 
Indignado, el diablo envió Oxuorgullo para llenar el corazón del pastor de orgullo. Pero el pastor oró, ayunó, leyó la Biblia, y se humilló delante de Dios. Y, una vez más, el diablo cayó por tierra. 
El diablo vio que todos sus intentos habían sido frustrados. Enojado, decidió mandar a esos tres demonios a la iglesia de aquel pastor para ver dónde se equivocaba. Y para allá fueron, sólo estudiando y marcando sus pasos. 
Un día, los tres demonios, aún sin haber conseguido nada que pudieran usar contra el pastor, vieron pasar a otro demonio por aquella iglesia. Venía él de lejos, lentamente, usando bastón, con un aspecto cansado. Y los tres demonios comenzaron a burlarse de él. “Viejo cansado, ¿qué estás haciendo por acá?”. Y entonces le preguntaron su nombre. 
Él miró de reojo, se rió de forma sarcástica y dijo: “¿Mi nombre? Yo soy el OXUTIEMPO. Y ustedes, ¿qué hacen por acá?”. 
Y los otros demonios le contaron su misión y cómo habían fracasado hasta ese momento. Y entonces, le dijo a los tres: “esperen que yo les voy a dar la orden para cuando deban actuar”. Y dijo más: “No tengan prisa, porque yo sé cómo trabajar”. Y aquel demonio empezó a actuar sutilmente. 
Primero, le sacó el tiempo al pastor, llenando su agenda de cosas para hacer. Luego, 
él no tenía más tiempo para ayunar, y se debilitó. Después, le sacó el tiempo para leer la Biblia, y él no escuchó más la voz de Dios. Y sin oír la voz de Dios, su comunión se enfrió. Entonces, fue ahí que ese demonio dio la orden para que los otros entraran en acción. Y, así, aquel pastor que era un éxito rotundo, cayó. 

El tiempo es la 4ª arma usada por el diablo para enfriar la fe de los que perseveran. A veces, él nos atarea mucho. Otras, él hasta provoca un falso sentido de bienestar, hace que las luchas cesen por un tiempo para que nos acomodemos en la fe. Y es así que él nos derrumba. 

Recuerde siempre de dónde vino, de dónde salió, y de lo que Dios hizo en su vida para mantenerse siempre en la fe. El vencedor no es el que empieza, sino el que termina. 
Obispo Renato Cardoso

0 comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

© Solana Palacios, AllRightsReserved.

Designed by ScreenWritersArena