Reúna su personal periódicamente
En un viaje que hice a Israel, tuve la oportunidad de conocer una de las más grandes productoras de joyas del mundo, la “H.Stern”. Gentilmente el gerente me llevo a conocer todos los procesos de producción de una joya con diamantes. Es fantástico como el proceso de lapidación transforma el diamante bruto en una joya tan bonita y de mucho valor.
Muchos funcionarios son iguales al diamante: Mientras están “Bajo tierra”, son imperfectos, pero si son “lapidados” se vuelven preciosos colaboradores. Gaste un poco de tiempo con la lapidación de sus funcionarios.
Probablemente en su ambiente laboral hay varios diamantes brutos, y con un poco de esfuerzo es posible moldearlos. ¡Invierta en eso! No intente encontrar “funcionarios perfectos” en el mercado, porque casi siempre “estos” ya están empleados y/o son muy costosos. La mejor manera de tener buenos profesionales es fórmalos personalmente, transmitiendo su experiencia.
Aparte de eso, en las reuniones con los subordinados, el empresario tiene una buena oportunidad de enseñarles a ellos su visión del futuro y lo que espera de cada uno. Este último es un factor determinante en la realización de buenos negocios. ¿Si los funcionarios no saben lo que usted piensa, como podrán actuar como usted quiere?
Aun en los días de hoy, oímos muchos empresarios que mandan sus empleados a “rebuscar” la solución a los problemas del aquel sector. Vea, actuando así usted obtendrá un índice de resolución muy pequeño. No tenga hábito de abdicar, es decir, abandonar el comando de la empresa, lanzando sobre sus empleados las más grandes responsabilidades. La actitud más sensata es dar al funcionario la misión y acompañar su desarrollo. La exigencia solo sirve cuando va acompañada de la instrucción. Por ese motivo no deje que sus funcionarios resuelvan solos los problemas que surgieren, sin su orientación.
LAS REUNIONES CON SUS SUBORDINADOS SON IMPORTANTES PARA:
1) Discusión de proyectos y metas que quieran alcanzar.
2) Analizar las situaciones críticas y búsqueda de soluciones adecuadas para cada situación.
3) Mantenimiento y acompañamiento de proyectos iniciados para que no sean olvidados.
4) Mejoría de las relaciones sociales y motivación.
5) Formación de profesionales según las necesidades de la empresa.
6) Transmisión de conocimientos y de la visión del empresario.
7) Cambio de ideas y experiencias.
8) Crear democracia, buscando la opinión grupal.
9) Acercar el empleado al jefe.
10) Proporcionar libertad para exposición de nuevas ideas.
Para formar excelentes profesionales, el empresario no puede contar solamente con cursos y entrenamiento, se necesita más. Es necesario invertir más en la inteligencia práctica, es decir, adaptarlos a las necesidades de la corporación. En lugar de gastar “ríos de dinero” contratando y echando funcionarios, ¡entrénelos usted mismo!
Es unánime la opinión de los empresarios sobre las reuniones con los funcionarios. Ellas ayudan en la promoción de una relación de amistad entre empleado y patrón y también dan condiciones al empresario conocer personalmente cada funcionario, que piensan ellos, sus capacidades intelectuales, sus emotividades, sus preocupaciones con la empresa y su nivel profesional. Haga más reuniones con sus funcionarios. Esto es muy importante para el desarrollo de su empresa.
¿Con que frecuencia deben ser realizadas las reuniones? La frecuencia debe variar de acuerdo con el tamaño de la empresa. Normalmente, las empresas de porte medio y grande realizan reuniones con los gerentes y jefes una vez por semana y con los demás funcionarios una reunión mensual o bimestral. En las empresa menores que tienen pocos funcionarios las reuniones pueden ser conjuntas y hechas cada quince o veinte días.
*Fragmentos Sacados del Libro “Como ser Exitoso En La Vida Empresarial” de Natal Furucho. (Continuará)
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