HOGAR DULCE HOGAR

“Crónicas 6:12-30”

Me gustaría esta vez que leyeran este pasaje de la biblia porque es muy fuerte y tengo la certeza que va a hablar mucho para todos.

Muchos jóvenes y adultos, viven en concubinato, o mantienen relaciones con sus parejas sin estar casadas, para muchos de ellos, o mejor dicho para todos ellos que lo hacen piensan que está bien, porque de esa forma se está demostrando el amor que sienten para con sus parejas.

Pero lo que saben y no quieren admitir, ni escuchar es que están pecando contra el templo de Dios, porque nuestro cuerpo tiene que ser para todo esto, el templo de Dios, Su morada.

Este escrito que: el cuerpo no es para la inmoralidad sexual, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo. (Crónicas 6:13)

Y aun dice más: pero el que se une con el Señor, es un solo espíritu con Él.

Huid de la inmoralidad sexual. Cualquier otro pecado que el hombre comete, es fuera de cuerpo. Pero el que fornica, peca contra su propio cuerpo.

¿No sabéis que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, que está en vosotros, que tenéis a Dios, y que no sois vuestro?

Porque ha sido comprado por precio. Por tanto glorificad a Dios en vuestro cuerpo. (Crónicas 6: 17-20)

Por tanto nosotros que servimos a Dios, y que lo tenemos a Él, procure cuidar su cuerpo de todo, porque él es el templo de Dios, y mas allá de que en este pasaje hable de la fornicación, también hay que tener limpio nuestro corazón de todo rencor, enojo, ego, mal carácter; porque todo esto también ensucia al cuerpo, y al corazón también.

Nuestro cuerpo le pertenece a Dios, toda nuestra vida Le pertenece, por ello hay que cuidar y glorificar a Dios con nuestro cuerpo y con nuestras vidas.

Así que si usted es un joven o adulto que está viviendo esta vida, y está en la presencia de Dios, buscando de Él para hacer Su voluntad y salvar su alma, procure analizar con calma y en frio la situación y a que le llevara si sigue pecando contra su cuerpo. Si verdaderamente uno quiere servir a Dios va a sacrificar ese deseo de la carne para cumplir el deseo del Espíritu Santo en cada uno de ustedes. Además una persona debería esperar hasta el casamiento para tener intimidad con su pareja, porque de lo contrario lo único que logran es traer las cosas malas, si uno peca ahí es donde abren una brecha para que todo entre, peleas, discusiones, agresión física y verbal, etc.; y mucho pero aun, usted empieza a perder esas ganas de salvar su alma, de salvar su vida. Así que si quiere hacer las cosas bien, empiece por cuidar la casa de Dios con mucha más dedicación y amor.