Para el desafío Godllywood 20, vamos a
invertir en el Creador de Godllywood, el Espíritu Santo, pero de una manera
diferente, a como normalmente lo hacemos. Normalmente se ora a una cierta hora,
se ayuna, se lee la Biblia, en fin… esta vez vas a hacer lo que Él te ha pedido
desde hace mucho tiempo.
Tal
vez sea hablar de Jesús con aquella compañera del trabajo, tal vez sea acabar
con una pasión que tienes por alguien que Él ya te mostró no ser la persona
ideal para ti, o quién sabe, lo que el Espíritu Santo ha cobrado de ti es
perdonar a alguien o pedir perdón.
Sea
lo que sea, esta próxima semana, vas a hacer por lo menos una cosa que el
Espíritu Santo te ha pedido hacer. Si no sabe el qué, es porque no Le has
prestado atención, es necesario entonces hablar con Él y pedir que hable
contigo.
Y
como segunda tarea, vas a arreglarte todos los días para Él. Como prueba, a
finales de la semana, vas a dejar un comentario aquí en el Desafío Godllywood de lo que hiciste y lo provechoso que
eso fue para ti personalmente y en nuestra página del Facebook.com/Godllywood vas a publicar una foto de tu look
para Dios diariamente.
Poner en práctica
toda la agenda no fue nada fácil, ya que en ese tiempo que la había hecho no
era muy disciplinada con respecto a mi tiempo como aprendí a hacerlo ahora… hay
días con que el tiempo me sobra e invierto en cosas nuevas J
Cuando se
publico este desafío estaba en una etapa de mi vida muy difícil para mi, pero
logre salir adelante gracias a Dios, que Él fue quien me hablo con cada palabra
de Sus siervos… logre perdonar, y perdonarme a mi misma. Logre dejar el pasado ahí
donde pertenece, al pasado… y logre mirar solo para Dios y mi comunión con Él…
Hoy puedo
decir que mi vida si dio un giro muy grande… si bien vienen las luchas, pero
estoy lista, esperando por ellas… porque se quien pelea por mi.
Empece tambien a aferrarme mucho mas a Dios, a hablar con Él, dejar todo en Sus manos.
Y no permití
que la mala situación que estaba pasando me tomara por completo, por lo general
las mujeres cuando pasan por un problema, una desilusión tienden a no
arreglarse, se dejan estar… yo hice todo lo contrario… me arreglaba porque lo hacía
para Dios, y ninguna lucha ni el diablo iban a hacer con que mi estado se
hiciera evidente, pues sabia en quien estaba confiando mi vida… y Él hacía con
que todo cambiara… obvio que Dios solo puede trabajar si lo dejas… sino nunca podrá
hacer aquel maravilloso trabajo de restaurar y cambiar!
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