5/07/2011

El PERFIL DEL JOVEN DE DIOS - 4° parte

SU PERSPECTIVA

             Como ya dijimos, hay muchas fuerzas interesadas en atraer el joven para sí, pues él tiene una fuente de energía lista a ser utilizada.
             Todo joven, en su interior, tiene un sueño de ser feliz y tener éxito en la vida, tener casa, familia, buen empleo y dinero. Pero casi siempre ese sueño es ofuscado por las voces que, por todos los lados, creen saber lo que es mejor para él: “Usted tiene que aprovechar bien su juventud"; “Nada de casarse precipitadamente; usted tiene es que enamorarse bastante para ganar experiencia"; " Ese negocio de iglesia es para viejos”; etc.
              Comportamientos diabólicos se han infiltrados en los colegios actualmente. Ya no quedamos tranquilos cuando mandamos un hijo o una hija a al colegio, pues no tenemos certeza de que durante todo el periodo en que allá estén solos, irán adquirir buenas enseñanzas y buenos consejos.
              En fin, a cada día que pasa, el mundo queda peor y mucho más difícil para el adolecente ver su sueño ideal realizado. Despacio, las transformaciones por las cuales pasan la humanidad también transforman la mentalidad de la juventud. A partir de un determinado momento, ellos no quieren más obedecer a sus padres, el deseo de casarse y formar una familia es cambiado por los pensamientos de tener varios novios o novias y mantener una relación abierta.
              El sueños de formarse y ser alguien en la vida es ofuscado por una fantasía (vendida por la prensa) de tener mucho dinero, mansión y carro importado, como si eso fuera posible fácilmente. Los sentimientos de respeto y amor al prójimo son considerados "tontos" y dan lugar al egoísmo y a la indiferencia. Ese es el presente que una sociedad corrompida ofrece al adolecente. Entonces, podemos concluir que su perspectiva en este mundo no es muy optimista, a no ser que usted, joven, tome la dirección y siga el camino correcto. Si. Usted, y solamente usted, puede cambiar su suerte. Y aun digo más: ¡ahora es la hora para hacerlo! ¡Mañana puede ser demasiado tarde!
              No acepte que el mal que hay en este mundo tome cuenta de usted y dirija su vida. No se conforme en tener su vida dañada y destruida por las fuerzas negativas de este mundo. Dios le dio vida con un objetivo: glorificarlo. ¿Sera que usted puede decir, en este exacto momento, que su vida esta glorificando a Dios?
“…Alégrate joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia. Anda según los caminos  de tu corazón y la vista de tus ojos, pero recuerda que sobre todas estas cosas te juzgara Dios. Quita, pues, de tu corazón el enojo y aparta de tu carne el mal, porque la adolescencia y la juventud son vanidad…”
(Eclesiastés 11. 9,10)




EL ENCUENTRO CON DIOS

              Nunca se vio y se escucho hablar tantas tragedias involucrando jóvenes como en los últimos tiempos. ¡El índice de criminalidad entre los adolecentes crecen asustadoramente a cada día, en todo el mundo! ¡Las cárceles de menores están llenas!
              ¿Qué está pasando? ¿Qué está faltando para esos jóvenes (que en términos de bienes materiales, han sido mucho más privilegiados que las generaciones pasadas)? Lo que falta es un encuentro con Dios.
              Solamente el Espíritu de Dios puede llenar el vacío del corazón de cada joven. Hay países más desarrollados en que, el gobierno ofrece gratis a todo adolecente varias actividades educativas, culturales y deportivas, aparte de la educación normal. Pero, por increíble que parezca, en estos países el índice de suicido entre jóvenes de 15 a 25 años es más elevado.
              Eso muestra claramente que la muchacha y el muchacho pueden ser muy ricos, tener una buena educación, dinero, diploma, amigos, practicar deportes, una buena familia, etc. Aun asi, nada de eso puede dar sentido a sus vidas, sino el Espíritu de Dios.
             Pero es importante que se entienda que tener un encuentro con Dios no es solo frecuentar una iglesia o conocer la Biblia, ni mismo practicar los rituales cristianos. Eso es ser un religioso, mas no significa tener un encuentro con El.
             Cuando una persona tiene un encuentro con Dios, ella pasa a conocerlo personalmente a través del Espíritu Santo. Usted puede conocer a Dios a través de informaciones recibidas al respecto de Él, pero vuelvo y repito, eso no es el encuentro. Es como si tuviese conocimiento de un artista, un político a través de periódicos, revistas, radio y tv, pero usted aun no lo conoce personalmente. Si un día lo encuentra y mantiene una relacionamiento con él, entonces usted podrá saber quien realmente es aquella persona, sin depender de que los otros hablen.
             De la misma forma acontece con Dios. Vea el propio Job, que era un hombre de Dios, confesó en el final de sus dolores: De oídas te conocía, Mas ahora mis ojos te ven. Por eso me aborrezco y me arrepiento en  polvo y ceniza. (Job 42. 5,6)
             Desafortunadamente son muchos los que conocen a Dios apenas por oír y, por eso, viven engañados. Por tanto es imposible el joven tenga un encuentro con Dios y aun ande vacio y angustiado. El puede tener dificultades, luchas, necesidades, pero jamás es vencido por ellas, porque la fuerza de Dios está con Él.
             ¿Quién no se acuerda del joven David? Él era el hijo menor y en su juventud tuvo un encuentro con Dios, que pasó exactamente cuando el Espíritu Santo vino sobre él, al ser ungido por Samuel: “Samuel tomó el cuerno del aceite y lo ungió en medio de sus hermanos. A partir de aquel día vino sobre David el espíritu del Señor Así se levantó luego Samuel y regresó a Ramá.”(1Samuel16.13)… (Aun Continua este tema)…

*Fragmentos Sacados del Libro “El perfil del Joven de Dios” Capitulo1y2 PARTE 6 - Pagina 30/31/32/33/34/35 (Continuará).

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